7 septiembre 2024

Del centro cordobés a Palermo, el gran viaje de los Brangus de “Don Pancho”

Don Pancho” es un establecimiento netamente ganadero enclavado en la zona central de la provincia de Córdoba, entre Oliva y James Craik. En un campo de alrededor de 580 hectáreas Lucas Lingua, su esposa Gabriela y sus dos hijos, Guadalupe y Francisco, crían cerca de 350 vacas, entre receptoras de embriones, otras 70 a 80 de plantel y 15 a 20 donantes.

Este año, por primera vez pisan con sus animales de raza Brangus el predio de la Sociedad Rural de Palermo (SRA), donde la familia en pleno estará presente para la jura de la raza que será el próximo martes y miércoles.

Este año nos decidimos a venir a Palermo y trajimos dos vacas con sus crías y un toro”, detalló Lingua, y comentó que “Don Pancho” se inició en 2015, y “a pesar de ser todavía bastante nuevos ya participamos en distintas exposiciones y obtuvimos algunos premios. Lo más importante para nosotros es haber llegado a Palermo que es la cuna de la ganadería”.

En estos menos de diez años de vida, la cabaña realizó una importante inversión en incorporación de vacas de cabañas importantes de Argentina, y luego una selección de donantes para hacer embriones, “desde hace cinco o seis años que venimos poniendo embriones para hacer más rápido el avance reproductivo, con más terneros por año”, agregó el productor.

Lingua no tiene dudas al respecto, “para poder competir y estar a nivel hay que invertir, no queda otra”, y ponderó que “en la actualidad todo el trabajo lo hacemos con hembras nuestras, algunas que compramos muy buenas hace unos años, pero ya tenemos crías y donantes propias”.

En este punto, destacó que “estamos produciendo nuestra genética, nuestro biotipo. Nosotros buscamos un animal no tan grande, más moderado y mantenido. Lo que necesitamos es un animal que sea lo más precoz que se pueda”.

Cabe apuntar que los Brangus, por venir de una raza sintética índica, son menos precoces, “pero nosotros apuntamos a la precocidad, con buena conformación carnicera y buenos parámetros de área de ojo de bife y engrasamiento”, resumió el cabañero, y en el caso de los toros la apuesta es a conseguir correcciones estructurales en la línea inferior, prepucios con buena estructura, y hembras con buena producción de leche.