23 noviembre 2024

Aparte campero en la Expo Rural, con un abanderado multicampeón

El Aparte Campero es una competencia tradicional de Argentina, una destreza criolla por excelencia. Es la prueba que resume uno de los trabajos esenciales del campo, que es separar los rodeos. Requiere de una alta concentración y destreza.

En la Expo Rural 2023 fue una de las atracciones y en esta 18ª edición de Aparte Campero tuvo un ingrediente particular: Sergio Peppino, de La Carlota, provincia de Córdoba, quien ha ganado 10 de las 17 pruebas disputadas hasta el momento, y, por si fuera poco, obtuvo dos subcampeonatos. Si bien no clasificó para esta final, por su condición de multicampeón, la organización de la prueba lo distinguió para que sea el abanderado.

“Mi primera final fue en 2008, que vine con mis dos hijos, y hasta el año pasado estuve en todas las finales”, contó, y fundamentando su baquía dijo: “trabajo todos los días con hacienda en el campo, desde los 7 años que ando a caballo”

La prueba de Aparte Campero es la final de un campeonato federal en el que participan equipos (tríos) de todo el país en pruebas clasificatorias. En un lote de treinta animales que se numeran por trío, y que están en un corral, y hay que sacar -en el menor tiempo posible- tres vacunos que tengan el mismo número, para llevarlos desde un corral grande a otro más chico. Los tríos se van alternando en el aparte; uno por vez van a buscar la vaca del mismo número.

El Aparte Campero argentino es una creación de Mariano Wenceslao Andrade, una adaptación del Team Penning, de Estados Unidos. La particularidad de esta actividad en Argentina es que se realiza dentro del corral y así refleja con más rigor la labor del campo.

Apartando en familia

Las pruebas de Aparte Campero, cuya final nacional se disputó en la pista central de la Expo Rural 2023, no solamente demuestran el despliegue y la coordinación para juntar a los animales de un mismo lote, sino que también destacan la integración, sin ningún tipo de condiciones: los equipos se forman con integrantes de todas las edades, hombres, mujeres, familia.

Precisamente en esta final se destacó la participación de ‘los Gatti’ -mamá Daniela, papá Horacio, e Ignacio, el hijo- que demostraron en la pista lo que hacen cotidianamente en el campo con el manejo de sus rodeos. “Suelen participar padre e hijo, algún matrimonio también ha entrado a la pista, hermanos, pero de una familia no tenemos antecedentes”, dijeron desde la organización de la prueba.

La clasificación que se disputa a lo largo del año en toda la geografía argentina, tiene como riguroso requisito que deben usarse Caballos Criollos. Donde estén estos animales, y haya un corral con las dimensiones estandarizadas, se puede competir, previa homologación de la Asociación de Criadores de Caballos Criollos.

Para determinar el resultado se juzga el tiempo que demandó el encierre; se controla el buen desempeño de los jinetes; la educación, y el bienestar animal, porque no deben castigar ni golpear a los animales, ni al vacuno, ni al caballo. También observa que todo se desarrolle en la zona delimitada y que se encierren las vacas que tengan el mismo número.